Reflexiones de Entrenador, para vosotros, entrenadores. Capítulo 3.

Reflexiones de entrenador.

• Modelo de juego es la manera de jugar al fútbol y esta será más eficaz cuanto más perfilada la tengamos por medio de mecanismos, automatismos que hagan entender el juego a los jugadores. Los comportamientos, las características y las relaciones entre nuestros jugadores son otra parte muy importante del trabajo que tenemos que tener en cuenta y llevarlo hacia donde creamos más conveniente con la forma de llevar un grupo.
• Montar el trabajo desde la unidad, los subprincipios (que denominan en la periodización táctica de Victor Frade), para desde ir añadiendo piezas terminar en el equipo, los principios del juego. Regla de oro del Método Direccional. Utilizar el residuo del partido ya jugado de competición como ayuda correctora, y el partido próximo como nuevo reto de progresión. La semana de esta manera estará conectada e incentivada siempre por la competición.
• Componer una semana de entrenamientos conlleva una serie de condiciones a respetar. Primero, tenemos dos días de máxima intensidad que marcan pautas metodológicas físicas, técnicas, tácticas. Estos dos días son los dos partidos de competición, el ya jugado y el que esta por jugar. Por un lado esta la corrección del jugado y la preparación para el que se ha de jugar. Por otro lado esta el residuo físico del jugado que debemos limpiar y la nueva exigencia del que debemos jugar nuevamente. Por tanto, espacios, tiempos, rivales…todo es importante meterlo en la coctelera en su justa medida, para que al integrar el trabajo, este repercuta positivamente para bien de los jugadores.
• Por otro lado están los objetivos generales formativos en si, que hacen que tengamos que buscar sitio para cuestiones que influyen en la competición pero posiblemente no de forma puntual inminente, pero si en un futuro de forma determinante. Es difícil meter todo en una semana, pero es menos difícil si se pone uno a estructurar el trabajo de forma metódica y cariñosa diría yo.
• Las exigencias que debemos plantear a los jugadores de lo que se va realizando no pueden tener el mismo grado en octubre que en marzo. Pasar de ser más flexible a más estricto es lo natural. No se trata de domar un animal, se trata de progresar con un jugador. Tener en cuenta condicionantes fisiológicos y emocionales es parte también de la planificación semanal. 

Al final montar una tarea, una sesión, una semana, un partido…es como hacer un cocido en el que no solo es importante la calidad de los garbanzos, el compango e incluso el agua…
No menos importante, y yo diría decisiva, es la mano del cocinero y el cariño que le ponga a su quehacer. No tiene nada que ver un cocido en olla rápida a uno hecho por güelina en su cocina de carbón a base de tiempo y dedicación.
JAVIER VIDALES